Ongi Etorri Errefuxiatuak ha ofrecido una rueda de prensa frente al parlamento vasco en Gasteiz, para denunciar la situación de las personas refugiadas «pseudoencarceladas» en Lesbos, Grecia. Han decidido realizar la demanda hoy, pasado el día Internacional de los Refugiados, «porque hoy, un día después, las personas refugiadas siguen muriéndose». Han explicado los resultados de la Misión de Observación que siete miembros de OEE Araba han realizado en Lesbos hace escasos días, y han apremiado a las autoridades vascas a activar un corredor humanitario hasta la Comunidad Autonoma Vasca para las personas refugiadas en Lesbos, «que no son refugiados de segunda clase».

Rosabel Argote y Ainhoa Garagalza, de Ongi Etorri Errefuxiatua, han tomado la palabra para recordar que hace meses acudieron al Parlamento Vasco solicitando que se activasen corredores humanitarios como vías seguras de llegada al País Vasco desde Lesbos de familias refugiadas y menores con enfermedades. También han criticado que las personas refugiadas, «en el mejor de los casos», cuando logran llegar a la isla sin ser devueltas, siguen siendo «encarceladas en unos campamentos de estructura y funcionamiento más penitenciario que protector».

Siete miembros de Ongi Etorri Errefuxiatuak Araba acaban de volver de Lesbos

Han hecho públicos los resultados de la Misión de Observación que acaban de realizar en la isla griega. Han denunciado que activistas locales les han confirmado que Grecia esta bloqueando la llegada de personas refugiadas a la isla con prácticas ilegales. «Las devoluciones en caliente en Lesbos se producen ilegalmente cada día, de mano de patrullas camufladas con pasamontañas». Han mencionado un reciente vídeo que recientemente ha publicado el New York Times, donde grupos de encapuchados secuestran a las personas refugiadas que logran llegar a tierra firme y las devuelven a alta mar, abandonándolas allí en balsas sin motor. Desde OEEA han informado que en el último año, Médicos Sin Fronteras no ha podido localizar a 940 personas de las que tenía constancia que habían llegado a la isla.

Las personas que consiguen llegar a los campamentos son «las privilegiadas» ante la gente que es expulsada o que muere en el camino, según denuncian en la rueda de prensa, pero han criticado las condiciones de vida del nuevo campamento de Mavrovouni, en el que retienen a los refugiados tras el incendio del infame campamento de Moria. Han relatado que ahora se trata de un espacio más ordenado, «sin hacinamiento visible», pero que las dinámicas de expulsión de personas refugiadas «son más crueles por sofisticadas», como restringir la alimentación o la libertad de movimientos, «como si quienes piden asilo fueran delincuentes».

Desde Ongi Etorri Errefuxiatuak han denunciado, por último, el «clima de xenofobia y hostilidad que se esta fomentando en Lesbos desde discursos políticos alarmistas y campañas explícitas de incitación al odio y a la xenofobia». Han recabado testimonios de activistas y periodistas que han sufrido ataques por haber acogido a personas refugiadas, o haber participado en labores de rescate de personas a la deriva en el mar.

Petición a las instituciones vascas

Tras explicar la situación que se vive en Lesbos, han criticado que se trata a las personas refugiadas en Grecia como «refugiados de segunda clase», comparando la disposición que mostraron las instituciones a acoger a refugiados ucranianos con la que reciben en Lesbos. Han pedido la creación de un corredor humanitario desde Lesbos hacia la CAPV, que pase por la emisión de visados humanitarios como vía legal y segura de llegada y entrada en el territorio por motivos humanitarios de «un grupo de personas numéricamente acordado» siguiendo el patrón de los corredores italianos. También han reclamado la gestión con las instituciones estatales para la aprobación de un régimen de protección temporal y de autorización temporal de residencia para las personas acogidas en la CAPV.

Aquí se puede ver la rueda de prensa completa.