Juani Rishmawi. Imagen: Libertad Juani Facebook

Juana Ruiz, activista de derechos humanos residente en Palestina desde hace más de 35 años, ha sido puesta en libertad hoy, después de que el régimen israelí le hubiera concedido la libertad condicional el pasado 1 de febrero. Ha sido liberada tras pasar un total de 301 días secuestrada por las fuerzas armadas del régimen de apartheid Israelí. Ha sido sometida a aislamiento, continuos interrogatorios, y traslados constantes de prisión.

Sin embargo, la organización en la que coopera, Health Work Committees, sigue ilegalizada y toda el grupo de dirección en prisión (entre ellos el director y el tesorero). Hay seis organizaciones más de movimientos sociales palestinos también ilegalizados. Todos estos movimientos responden a una estrategia más amplia y prolongada en el tiempo desde el régimen de apartheid Israelí para destruir movimientos palestinos de izquierda.

Sobre Rishmawi, en conreto, pesan más de cinco acusaciones entre las que se encuentran la pertenencia a organización ilegal y el desvío de fondos de la cooperación al Frente Popular para la Liberación de Palestina, una de las principales organizaciones históricas de la izquierda palestina. Tales acusaciones tienen muy poca verosimilitud habida cuenta de los férreos controles a los que están sometidas las subvenciones públicas a la cooperación, lo cual no es un obstáculo para que el régimen de Tel Aviv continúe con este castigo ejemplarizante contra esta cooperante.