Convocados por la plataforma AHTrik Ez Araba este miércoles los distintos partidos con representación en las Juntas Generales de Araba han participado en una mesa-redonda sobre el Tren de Alta Velocidad. El coloquio, moderado por Unai Gartzia, contó con la participación de Izaskun Moyua del PNV, Ana Salazar del PP, Kike Fernandez de Pinedo de EH Bildu, Josu Ubierna del PSE y José Damian Garcia de Elkarrekin Podemos.

Se formularon diez preguntas, en las que se trataban los diferentes aspectos económicos y sociales de esta infraestructura. A lo largo del debate se dejaron ver dos bloques diferenciados, mientras EH Bildu y Elkarrekin Podemos rechazan el TAV; PP, PSOE y PNV defienden su necesidad. Solo coincidieron en su apoyo al soterramiento de las vias en Gasteiz, aunque con diferentes matices.

Izaskun Moyua defendió que se trata de un proyecto europeo, cree que se trata de un tren social y rechazó la construcción de un tercer hilo ferroviario, ya que a su juicio el trazado actual no es valido. Desde el PP, Ana Salazar defendió que es un proyecto importante y beneficioso para toda la población alavesa, aunque no negó los posibles impactos en el sector agrario, por eso abogó por el consenso y minimizar el impacto. El PSE también cree que son necesarios nuevos trazados, por la necesidad de mantener altas velocidades, y aludió a que se amortizará a largo plazo. Al mismo tiempo, rechazó una consulta popular ya que los posicionamientos sobre el tema aparecen en el programa electoral de cada partido.

En sentido contrario EH Bildu rechazó el proyecto, ya que cree que es una imposición, tiene un gran coste, abre nuevas cicatrices en el territorio, y arruina a muchos pueblos; por eso aboga por un tercer hilo y apuesta por un proyecto de tren social como Araba Tran. Por su parte, José Damian Garcia de Elkarrekin Podemos afirmó que el TAV es un despilfarro, por eso apuesta por la necesidad de modernizar las infraestructuras actuales, al tiempo que criticó que la ciudadanía esta pagando el TAV con sus impuestos, y solo lo podrán usar las personas con rentas altas.