Drama en el Kurdistan sirio
Cuando las tropas sirias en 2012 se replegaron del norte de Siria, los kurdos ocuparon el vacío dejado por el ejército.
Y surgió entonces una entidad, Rojava o el Kurdistán sirio, que se ha mantenido autónoma hasta ahora, después de gobernar el tercio noreste del país con las llamadas Unidades de Protección del Pueblo (YPG, sus siglas en kurdo).
Es preciso recordar que el pueblo kurdo se halla dividido, repartido, en media docena de países, veinte millones asentados en Turquía, doce millones en Irán, ocho en Irak, varios millones en Afganistán, y dos millones escasos en Siria, dirigidos por el Partido Komunista Kurdo, (PKK) y que carecían de peso específico en dicho Estado.
Pero a partir del 2014, sus fuerzas armadas lograrían una relativa gran audiencia en esta triste, o al menos, discutible historia, en la que cuentan con diez mil muertos en sus filas, en su lucha contra el Estado Islámico bajo la dirección de EEUU.
Con esto último, o a pesar de ello, Rojava se ha constituido en uno de los puntos más brillantes de la insurrección en Siria, y que ha dado origen a un notable experimento de democratización.
Hace seis años, en Rojava, surgió un cambio radical que afectó a varios millones de personas, que se sintieron reconocidos en su identidad-diversidad cultural, étnica, religiosa…
Cuentan…, que Abdullak Okalan, jefe del Partido Comunista kurdo en prisión desde 1999 y que hoy continúa detenido, la lectura del ecologista y anarquista Murray Bookchin, le llevó a un replanteamiento de sus estrategias y tácticas, y a alejarse definitivamente del partido leninista vertical que presidía.
Se multiplicaron las asambleas populares, que se constituyeron en órganos de representación y toma de decisión en cada núcleo urbano, donde la cúpula estaba compuesta por kurdos, árabes, cristianos, y asegurando en todo momento la presencia de la mujer.
En el Partido Komunista Kurdo, (PKK), ya no se habla de crear un Estado Kurdo, por el contrario se acepta el “municipalismo libertario”, potenciando comunidades libres, autónomas, basándose en los principios de la democracia directa y buscando su interrelación. De esta forma se intenta erradicar los cimientos del sistema patriarcal, colonialista y capitalista.
Desde el 2005, el PKK contempla el Movimiento Zapatista de Chiapas, y declara un alto al fuego al Estado Turco, mientras concentra sus esfuerzos en el desarrollo de estructuras democráticas en los espacios donde subsiste.
Así surgieron Consejos, Asambleas, y se fortalecieron las Milicias Populares, y las propiedades del Régimen pasaron a manos de cooperativas administradas por trabajadores y trabajadoras, a pesar de la oposición derechista.
Ahora, este pasado 9 de octubre el Estado Turco, que dispone del segundo ejército más poderoso de la OTAN, amenazó con una operación militar cínicamente denominada “Operación Fuente de Paz” en el Kurdistán Sirio, Afrin, Rojava y sus contornos.
La presencia militar USA había impedido hasta ahora la intervención turca en Siria, ahora la ofensiva turca se ha saldado con doscientos mil desplazados, ciento veinte muertos y quinientas bajas entre sus combatientes kurdos.
Dos rivales históricos como Rusia y Turquía pactan una zona de seguridad para Ankara en la frontera siria, de donde es expulsada la población kurda. Rojava, no desaparece del mapa pero se le impone nuevos límites territoriales y alianzas.
Por todo lo dicho, entiendo, que ningún poder establecido, o democracia burguesa, tome en consideración esta experiencia y quiera publicitarlo, pues minaría las bases de su propio sistema patriarcal, colonialista y capitalista.
Y esa es la razón, por la que tanto la prensa europea como la estadounidense, nunca la tomaran en consideración o hicieran publicidad de la misma.
Ante la cerrazón de los poderes establecidos, o llamadas democracias, que han consagrado la guerra como único instrumento de resolución de conflictos, Gora Rojava, eta Gora el Kurdistan sirio.
Imanol Olabarria Bengoa
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