Tejedoras de la memoria
Hermoso concepto en el que se entremezclan experiencias, resistencias, luchas, memoria, retos, sueños, etc. y que recoge las pequeñas y poderosas historias de la vida que van ocurriendo en contextos determinados. Hechos que deben ser recogidos para que se conozcan, para que su recuerdo perdure en el tiempo como testimonio de lo vivido y de lo ocurrido y como contrainformación a las Historias y Verdades oficiales.
Las Tejedoras de la Memoria han sido históricamente mujeres de diferentes lugares del planeta que, utilizando diversos materiales y códigos culturales, mediante el arte de hilar han ido tejiendo y narrando los acontecimientos que querían plasmar.
Hoy, Las Tejedoras de la Memoria, de las que quiero hablar, son mujeres que utilizando materiales como la valentía, la solidaridad, la denuncia, la complicidad, la dignidad… van tejiendo hermosos tapices llenos de vida y generosidad para dejar constancia de su pequeña-grande historia para quienes lo quieran conocer y compartir.
IRATXE SORZABAL, militante de ETA fue detenida en Francia e ingresó en prisión hasta su expulsión de territorio francés el año 1999. El 30 de marzo de 2001 fue arrestada en Hernani por la Guardia Civil y ahí comenzó su viaje por el horror. Cruelmente torturada (electrodos, bolsa, abusos sexuales…) tuvo que autoinculparse para “salir de aquel infierno” Su testimonio está recogido en el libro “Tortura en Euskal Herria 2001” En el juicio celebrado en la Audiencia Nacional el pasado 8 de febrero, tuvo que volver a revivir el espanto y a pesar de que el Protocolo de Estambul (conjunto de normas internacionales para documentar la tortura y sus consecuencias), corroboró la existencia de la tortura, la Audiencia Nacional ha fallado que el maltrato “no ha quedado plenamente acreditado” y condena a Iratxe a 24 años de cárcel. ¿Venganza por desvelar la crueldad y miserias de esta democracia y enfrentarse a la impunidad de las cloacas del Estado? Esta valiente y generosa mujer nos ha transmitido su historia y también ha recordado a los cientos de personas encarceladas que tuvieron que autoinculparse para escapar del horror de las comisarías y a las 4.113 personas torturadas recogidas en el informe presentado por el Gobierno Vasco. Su historia me ha llevado a recordar a personas conocidas que fueron encarceladas y maltratadas hasta el infinito.
OLATZ, ELENA Y SANDRA ocuparon la portada de la revista ARGIA nº 2761. La imagen y el título “Bular bakarrarekin eta harro” llamaron de inmediato mi atención. Son tres mujeres que han enfrentado y superado un cáncer de mama. Me impresionó y emocionó la entrevista publicada en la revista en la que comparten sus procesos a partir de haber afrontado una masectomía. Muestran sus miedos, los estereotipos observados en la profesión médica; hablan sobre las cuestiones importantes que deben abordar como mujeres con cuerpos diferentes, de la superación de estigmas sociales, etc. Para ello han creado la asociación Iñurri Elkartea. Se plantean vivir el cáncer con naturalidad, desde el feminismo, el amor, el cuidado… y emprender, con otras mujeres, nuevos caminos que permitan una vida digna de ser vivida.
Olatz, Helena y Sandra, quieren recoger la fuerza de quienes les precedieron y ofrecen alegría de vivir, escucha, participación…Consideran necesario abrir el cajón de los tabúes y hablar del cáncer, de la muerte, las emociones, la belleza, es decir, de cuanto causa temor tanto a nivel personal como en sus entornos. Han editado un calendario mostrándose con sus actuales cuerpos, precisamente, para sacarlos de la in-visibilidad. Sus historias valientes invitan a reflexionar sobre los cánones de belleza y la construcción de lo femenino en nuestra agresiva sociedad de consumo y nos enriquece como seres humanos.
ANA PINTO Y NAJAT BASSIT se conocieron en una finca como temporeras para la recogida de fresa y años después crearon junto a otras compañeras la asociación de Jornaleras de Huelva en Lucha para defender los derechos de trabajadoras como ellas.
El colectivo surge a raíz de la denuncia en 2018 de un grupo de mujeres temporeras de Marruecos, que destaparon las situaciones de injusticia que se vivían en los de campos de Huelva en general y en el asentamiento de Palos de la Frontera en particular, informando sobre las condiciones laborales y de vida de pura explotación y precariedad, hasta los casos de violación y abusos sexuales hacia algunas trabajadoras marroquíes que vivían en a Huelva.
En razón de su compromiso Ana y Najat perdieron sus puestos de trabajo y ya nadie les contrata en la zona porque se organizaron y pusieron sobre la mesa las situaciones de 3.000 personas que viven en la provincia de Huelva. Además han creado redes con otros sectores olvidados por el sindicalismo convencional, como la asociación de trabajadores africanos, del metal, las kellys…etc. Pasé por Eroski. A la venta, atractivas bandejas de fresas de Palos de la Frontera. Al instante recordé a las mujeres temporeras y solicité una entrevista con alguien responsable de Eroski para pasarle información sobre el artículo escrito por Ana y Najat, Tejedoras de la Memoria. Estoy a la espera.
ONEKA, Plataforma de Mujeres Pensionistas de Euskal Herria. Cada lunes y desde hace 4 años el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria sale a las plazas y calles en defensa de sus derechos. Un grupo de mujeres pensionistas, cargadas de razones y experiencia en iniciativas sociales, crearon ONEKA, con el objetivo de incorporar, dentro del movimiento de pensionistas, reivindicaciones, propuestas, reflexiones, etc. desde una perspectiva de género; haciendo hincapié en las condiciones sociales y económicas de las mujeres más desfavorecidas. Además su interacción con otros colectivos sociales, va desmontando tópicos edadistas y demostrando que tras la jubilación hay vida activa. Ellas paso a paso, con creatividad y compromiso van escribiendo su historia, nuestra historia, y ocupando un lugar en el imaginario social. Todas ellas son TEJEDORAS DE LA MEMORIA.
Para concluir, de verdad, Gerrarik ez? ¿Qué estamos dispuestas a hacer frente al centenar de empresas vascas implicadas en la producción militar y que cuentan con la colaboración de instituciones como el Gobierno Vasco, Universidades, Banca, etc.?
¿Quieres apoyar a Hala Bedi?
En Hala Bedi construimos un proyecto comunicativo libre, comunitario y transformador. En el día a día, cientos de personas participamos en este proyecto, observando la realidad que nos afecta y tratando de transformarla junto a los movimientos populares.
Nuestros contenidos son libres porque nadie nos dicta qué podemos publicar y qué no. Y porque difundimos estos contenidos de forma libre y gratuita, con el objetivo de difundir, compartir y transformar.
Sin halabelarris, las socias y socios que apoyan económicamente a Hala Bedi, esto no sería posible. ¡Hazte halabelarri y apoya a Hala Bedi!