Bizilagunak
En euskera vecina o vecino se dice “bizilaguna”, que en su sentido literal quiere decir compañera o compañero de vida. Nunca me había parado a pensarlo hasta hoy, hasta que he decidido sobre que quería hablaros hoy a los oyentes del Suelta la Olla.
De hecho, suele pasarnos a menudo lo mismo con otras muchas palabras en euskera, las usamos habitualmente y un día nos damos cuenta que tienen un significado especial, bonito… Pero hoy no es día para hablar de ello, hoy toca hablar de vecinas y vecinos, de “Bizilagunak” que comparten tierra, y a veces casa, con nosotras y nosotros. No tanto del vecino ruidoso del 5º o la vecina amable del tercero, si no de personas que conviven en nuestros pueblos, villas o ciudades.
Y quiero empezar hablándoos de Chakib, un joven que el domingo pasó a los anales de la historia del atletismo vasco porque ganó la carrera más popular que ese organiza en toda Euskal Herria. El domingo la Behobia-San Sebastián estaba de aniversario, 100 años de carrera nada menos, para 55 ediciones; y cuando todo apuntaba a que el ganador podía ser un autóctono, Iraitz Arrospide… sorpresa! Porque en los últimos metros Iraitz se vio sobrepasado por un auténtico vendaval. Y digo bien vendaval, porque en su acepción original del francés “vent d’aval” significa “viento de abajo”. Y de abajo vino, de Marruecos, en los bajos de un camión concretamente, hace once años Chakib Lachgar, el atleta que este domingo ganó la famosa carrera.
Gure bizilaguna, nuestro vecino de Errenteria que tras llegar en los bajos de un camión pudo afincarse primero en Tolosa y finalmente en Orereta. Nuestro “compañero de vida” que tras sufrir la crisis como todas y todos, y emigrar a Alemania, fue allí donde empezó a correr con un amigo, y descubrió en el deporte su verdadera pasión, en el atletismo su forma de estar en la vida.
“Errenteria es mi casa, tras competir pienso en regresar lo antes posible” cice Chakib, y yo me pregunto por qué en los titulares sobre la carrera no decía lo siguiente: “El gipuzkoano Chakib Lachgar flamante ganador de la Behobia-San Sebastián”.
¿Cuánto tiempo tendrá que pasar para que lo consideremos de aquí? ¿Para que lo hagamos “bizilagun”? Quizás a partir de esta victoria le será más fácil…
Mientras tanto este domingo podremos conocer a todas esas gentes que venidas en bajos de camiones, pateras etc… conviven con nosotras aunque muchas veces no las queramos ver.
El programa Bizilagunak nos da la oportunidad de ser anfitriones o invitadas, sólo hay que apuntarse en la página de CEAR Euskadi. El año pasado más de 1.000 personas de 44 nacionalidades se reunieron para comer en 93 casa y txokos. Bizilagunak 2019: por una convivencia entre culturas y sin rumores xenófobos.
Bizi lagunarekin, egin gaitezen “bizilagunak”: compañeras y compañeros de vida.
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